El libro que pifia |
Tal como indica la suave voz española del GPS, podría decirse que el radar de los horáculos modernos debe estar "recalculando" lugares y tiempos de los hechos apocalípticos, ya que la llegada de estos ya parece un simple cuento de la buena pipa.
Hace unos días los terremotos que acabarían con la capital de Italia, Roma, terminaron sucediendo en la ciudad murciana de Lorca, España; este último fin de semana no llegó el tan anunciado "fin del mundo" -tal como la fecha de esta nota lo demuestra- y su predicador Harold Camping comunicó su debida "reprogramación" para el 21 de Octubre.
N de la R: chequéese la existencia de este blog dentro de 5 meses para corroborar la efectividad de la última profecía.
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