Ameal sale del closet

El Vice venido a Presi.

Ahora que las aguas no bajan turbias - o por lo menos no tan turbias- Jorge Amor Ameal, presidente de Boca Juniors, reemplazó al vocero del escándalo Juan Carlos Crespi, y salió a disparar conceptos sobre su gestión en una entrevista brindada al diario "Libre".

La frase que más destaco es la que hace referencia al promedio general de su presidencia: "Lo que te marca en este club son los resultados". Luego de coincidir con ese concepto, debo resaltar los pésimos "resultados" del equipo Xeneize desde aquel 2008, donde Boca se consagró campeón días después de la muerte de Pedro Pompilio.

Allí el mandato le cayó "como peludo de regalo" al momentáneo vice, ex director general de peñas del interior. Bajo su directa dirección, desde aquella vuelta olímpica hasta este gris presente, tras el doloroso paso de 8 DTs, Boca no ha concluido ningún torneo por encima del décimo puesto. Reitero: los resultados mandan.

Acto seguido, y contradiciéndose con lo expuesto arriba, recae sobre la importancia de los números económicos para juzgar su mandato, cuando amenaza diciendo que "en Junio presento el balance y ya van a ver si fui el peor presidente de la historia", haciendo referencia al mote otorgado por Diego Armando Maradona. Pregunto: ¿Y los resultados?

Campeón Apertura 2008

Luego Ameal hace un simple repaso de su también simple accionar: "Trajimos al mejor mánager, a los mejores técnicos, a los mejores jugadores (...) pero la pelotita no entró". De eso se trata su dirigencia, de armarse de los que saben en sus puestos y esperar que por obra y gracia del destino formen el mejor equipo de todos los tiempos. Pero como todos sabemos y él bien dice en ese mismo renglón, "el fútbol no tiene lógica". Así también debiera saber que un equipo no se arma sólo con agrupar nombres.

Para ir concluyendo y no seguir cargando mis tintas contra el actual presi del club de mis amores, cito la siguiente frase: "La verdad es que busco qué hice mal y no encuentro nada". Quiza su único error haya sido haberse presentado como Vice conociendo lo que alguna vez confesó sin pudor, "no saber nada de fútbol". Concluyo: rodearnos de los mejores no nos hace de por sí ser los mejores.