Una idea imperativa se desprende desde el oficialismo como condición sin ecuanón: la prohibición de voto para las elecciones presidenciales de Octubre a quienes no lo hagan en las primarias del domingo.
Tras ella, las preguntas del ciudadano cualunque. Pueden prohibirme votar siendo el voto el elemento más representativo de la democracia? No. Si estoy en el padrón, puedo votar. Es así de simple. Ante cualquier teoría prohibitiva se sobrepone la libertad del sufragio. Entonces pibe, vení votá.
0 comentarios:
Publicar un comentario