Problemas técnicos

La reacción del Coco fue noticia.

Como pocas veces en la historia de nuestro fútbol, los directores técnicos se han adueñado de las tapas deportivas de la semana. Pero sus protagonismos no radican en cuestiones puramente futbolísticas sino más bien a cuestiones extra curriculares. Vale aclarar que si alguno de los siguientes casos integra la sección amarilla de algún periódico no será pura coincidencia.

El caso más trascendente por su crudeza fue el que protagonizó Alfio Basile, DT de Racing, cuando se deschabetó ante los hinchas que insultaban a sus jugadores a la salida del Cilindro de Avellaneda. “La c... de su hermana, los peleo a todos” disparó el Coco ante todas las cámaras, concluyendo una tarde en que nada bien le salió a su team, que cayó ante el último Banfield –hacía 9 partidos que no ganaba- y sufrió una nueva expulsión de su delantero Teo Gutiérrez.

Pedrito en los 90 ya era bravo.

Otro evento muy llamativo, aunque con menos trascendencia por la menor popularidad del actor principal, lo efectuó Pedro Monzón. Cuentan las crónicas que, tras negarse a bajar el volumen de la música que escuchaba en la concentración de su equipo San Martín de Tucumán, el DT decidió enfrentar a piñas al gerente del club que solicitaba juicio en su habitación. La riña terminó con una denuncia penal contra el ex defensor del seleccionado y el cargo de entrenador vacío.

Atractivo también es el momento en que Néstor Gorosito, entrenador de Argentinos Juniors, decidió presentar la renuncia a su puesto laboral: nada más y nada menos que en la sala de una clínica, donde reposa desde el sábado tras haber sufrido un hematoma renal y una fractura de vértebra debido al vuelco de su auto. El análisis del accidente también rozó el amarillismo ya que algunos periodistas cuestionaron el motivo por el cual Pipo se alejó de la concentración esa madrugada.

Por último, y sin dejar de lado las sospechas, entra en este ránking de curiosidades la salida del DT de Banfield, Jorge Da Silva. Pese a haber logrado su primer triunfo en apenas 4 partidos dirigidos, abandonó su cargo casualmente cuando su equipo del corazón, Peñarol de Montevideo, prescindió de los servicios del histórico Gregorio Pérez.

Como puede observarse, las noticias que invaden hoy los suplementos deportivos no surgieron desde algún banco de suplentes, ni siquiera desde dentro de un vestuario todavía tibio por el cansancio de 90 minutos. Lejos de parecerse a una agenda futbolística, la actualidad de los entrenadores de nuestro fútbol se marcó por los hechos curiosos que protagonizaron fuera del campo de juego. “Problemas técnicos”, como suele decirse en muchas transmisiones.